miércoles, 11 de noviembre de 2009

Mitos de la aviación

Damos a los aviones por sentado, hasta ese día que nos sorprenden



El primer vuelo en la historia bien pudo venir de Samuel Pierpont Langley, físico y astrónomo nortemericano –cuyo prototipo incluso incluía un motor de combustión interna- y todo parece indicar lo habría conseguido en 1903, de no haber sido por haberse quedado sin dinero. Los fabricantes de bicicletas Orville y Wilbur Wright consiguieron lo que él no pudo terminar no por una necesidad (como en el caso de Dédalo e Ícaro, presos en el laberinto de Creta, acosados por la terrible bestia del minotauro) sino por su simple afición al planeo. Cómo Ícaro volcando hacia el sol, el hobby ya había costado la vida a no pocas personas: El primer deslizador llevando a un hombre a bordo vino a cargo del inventor inglés George Cayley en 1845….y le costó la vida….


La caída de Ícaro


Aunque difícilmente hubo quien se percatara en ese momento, los hermanos Wright iniciaron la era de la aviación un 17 de diciembre de 1903 remontándose en el Kitty Hawk, básicamente un planeador impulsado con una hélice. Se elevaron a los 255 metros de altura por casi un minuto. Es interesante que la aviación no comenzó a ser tomada realmente en serio –o más allá de una curiosidad peligrosa-hasta que Charles Lindberg cruzara el Atlántico en 1927 en el “Espíritu de San Luis.”

Al día de hoy la aviación continúa siendo objeto de curiosidad e inquietud por parte del público. El famoso escritor de ciencia ficción Isaac Asimov, por ejemplo, podría hacer montar a sus personajes en naves espaciales surcando miles de años luz, pero él en lo particular odiaba volar. Pero que el avión es el medio de transporte más seguro que existe no queda la menor duda. La Asociación Internacional del Transporte Aéreo, (la IATA por sus siglas en inglés), sostiene que entre el 2007 y el 2008 la probabilidad de sufrir un accidente aéreo fatal bajó aún un 56% hasta alcanzar el 0,13 por cada millón de pasajeros, diez puntos de diferencia en relación al año anterior, y mucho menor que ser parte de un accidente nuclear, ser castigado por un rayo (la cual es una entre once millones) y mucho mucho menor que la posibilidad de que la tierra sea impactada por un meteoro catastrófico el día de hoy (sobre los riesgos de contraer cáncer por el uso de cigarrillos, ni hablemos). 

Si la tasa de accidentes es tan baja no es tan sólo por la alta tecnología puesta en estos aparatos, o las exigentes normas seguidas a nivel mundial, sino también y especialmente por la alta preparación que reciben quienes vuelan estos aparatos


Josmar



El peor terrorista del mundo

“En Cancún me hicieron una broma durante un simulacro de evacuación” comparte Juan José García González, quien dirige la agencia Tornado en la ciudad de Guadalajara. “Normalmente estos simulacros se hacen entre compañeros, y se invita a gente de otras partes para que lo observen. De repente llegaron cuatro secuestradores encapuchados, armados. Se subieron al avión y nos amagaron.”



El espectáculo, desde luego, tomó por sorpresa a García González quien sabía que tal evento “No estaba en el show’”, pero a cada protesta recibía una nueva amenaza. Lo que siguió complementó los elementos de una buena película:

“De repente se dejó venir el ejército, rodeó el aeropuerto, helicópteros al por mayor, llegó la cruz roja, llegaron los bomberos, la PFP, todos.”

Cuando al final las autoridades cumplen su misión doblegando a los aeropiratas, sobreviene un revés aún más inesperado: “los secuestradores se quitan al capuchón y dicen ‘muchas gracias por participar; esto fue un simulacro. Y no estaba preparado, ¿he?’”

El resultado fue el cese de la organización de seguridad del aeropuerto de Cancún, ya que las armas habían sido introducido a través de los cuerpos de vigilancia del propio aeropuerto.”¿Cómo las metieron? ¿Quien sabe?”

Para García González esto crea una cierta luz sobre el igualmente sorpresivo e inesperado evento del pasado 9 de septiembre, donde El boliviano José Mar Flores Pereyra intentó lo que fácilmente podría ser calificado como el abordaje aéreo más burdo del mundo, de inmediato cubierto por la televisión local e internacional y sacándonos a todos por un momento de nuestras faenas cotidianas.

“Y ahorita traen el mismo problema en Cancún” advierte García González al respecto. “Ayer salió el de seguridad pública a decir que Cancún no está haciendo las cosas bien. Es cierto, Se les pasó el paquete de dos botellas de jugo apachurradas, ¿cómo es posible que no se les haya visto en los rayos X?”




"Pasé las cosas y en la sala de espera, arme las piezas ¿pasó las cosas por separado y pasaron por este túnel, por esta banda de rayos x? si, así fue" declaró ante el juzgado siguiendo su caso, según lo describe a la agencia Notimex, asegurando que construyó el “aparato” en la sala de espera a la vista de todos, sin que ningún vigilante le llamara la atención. “Durante la espera armé las latas de Jumex y las forre con la cinta adhesiva y en una caja pequeña arme el supuesto detonador, acondicionándolo con un calcetín y ropa interior y lo envolví con cinta adhesiva para que diera la forma de que se trataba de una bomba".

 Lear Jet
El Lear Jet
La opinión pública mexicana, insisto, tiende a buscar explicaciones más complejas, como el distraer la atención nacional de una reforma fiscal cuyo debate se encendía cuando el evento del “secuestro” ya no era más que una anécdota remota. Es una actitud recurrente. Historias inconsistentes se comenzaron a decir del jet Lear Jet donde perdiera la vida el Secretario de gobernación Camilo Mouriño:

“El Lear Jet es uno de los aviones más seguros del mundo” asegura García González. “Hay muchas falacias. La seguridad mexicana en pilotaje es del 100 %. El piloto mexicano está considerado como entre los primeros 10 a nivel mundial. En el Bureu de Washington la aviación mexicana tiene prestigio. Dime cuántos aviones comerciales se han caído. Yo recuerdo el último fue en 86. De ahí en más no ha habido otro. Mexicana de Aviación ha tenido dos accidentes en su historia de 70 años.”

“Cuando lo de Mouriño pasó, se quiso involucrar hasta a la asociación de pilotos aviadores de México, y ellos no estaban de acuerdo en realizar exámenes más rigurosos” insiste. “¿Más riguroso de qué? Ya el examen es riguroso. Se dice que las capacidades que ellos tomaron no fueron en tiempo, que el simulador no era el correcto. Es realmente pura especulación y situaciones nomás por amolar.”


Aviación mexicana
Pero si hay un lugar seguro para volar, es justamente en México, precisamente por instituciones como la dirigida por García González: “Hay muchos mexicanos en todo el mundo donde pilotean aviones de Japón, de China, en Arabia Airlines incluso: hay compañeros que están trabajando en aviones muy grandes como el 747 de Boeing; incluso hay uno que pilotea para el 380 de la Airbus, que es el avión más grande del mundo.”

Entrenamiento riguroso y disciplina mental es una de las diferencias de cuando se tripula una de estas moles de decenas de toneladas, incluyendo lo que él llama “consciencia situacional”:

“Es la consciencia que tenemos desde que nos subimos al avión, los problemas los dejamos afuera. Nosotros, como seres humanos, la consciencia situacional a veces no la tenemos en tierra; si tuviéramos cursos como los aviadores sobre la conciencia situacional, no habrían tantos accidentes. Ni siquiera hablaríamos con el celular en la mano, o las chavas se maquillarían mientras van en el coche. Esa es una licencia que nos da tránsito. A nosotros nos autoriza la secretaría de comunicaciones y transportes, y la dirección general de aeronáutica, a cambio de informes, exámenes rigurosos, y a parte de uno tener la consciencia situacional”.





Pilotos famosos
Hoy en día el número de celebridades dedicadas a la aviación es impresionante: Desde el rockero David Lee Roth (quién hace “Jump” desde los aires, hasta Harrison Ford que si bien no sucra el hiperespacio en el Halcón Milenario, si posee una licencia de piloto particular (¿quién será su Chewbacca?) Y la lista sigue: Angelina Jolie, Clint Eastwood, Tom Cruise (no creemos incluya aterrizajes en portaaviones) El fallecido Patrick Swayze, a Morgan Freeman (y desde luego, la familia Bush)

1 comentario:

  1. El avión de los hermanos Wright no se llamaba Kitty Hawk, sino Flyer I, Kitty Hawk es el lugar donde hicieron su vuelo. 255 metros no fue la altura a la que ascendieron, sino la distancia que recorrieron.

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